Denuncia por injurias

A la hora de denunciar por injurias, debemos de conocer qué es en concreto una injuria así como las penas que se imputan por un delito de injurias:

Una injuria es una expresión que viene a dañar nuestra imagen o nuestra dignidad y que perjudica nuestra reputación. Los hechos expresados en un delito de este tipo pueden contener juicios de valor que ya sean verdaderos o falsos atentan contra nuestra persona y terminan dañando nuestra autoestima.

La denuncia por injurias solamente progresa cuando se trata de un caso grave, no se puede denunciar por un leve insulto o una disputa dentro de un bar. Nos referimos más bien a injurias cometidas desde un medio de comunicación amplio como la prensa o la televisión. Aún así, el delito de injuria requiere mucho carácter subjetivo, y dependerá de las circunstancias para poder leer más allá de lo que se ve redactado. Son muchas las circunstancias que pueden beneficiar o perjudicar a la persona y no conviene pasar por alto tales sucesos y emitir una pena sin estudiar a fondo el caso.

Pena por injurias

Por lo general la denuncia de injurias suele imponer al imputado una pena que va de los 3 a los 6 meses de multa, siendo en los casos graves, de amplia difusión como comentábamos antes, de prensa, radio o televisión, las que acarrean mayores penas, que van de los 6 a los 14 meses de multa.

Además cuando la injuria conlleva por detrás una comisión o un beneficio añadido, la persona imputada puede ser castigada con la inhabilitación de su cargo o de su profesión desde 6 meses hasta 2 años.

En el caso de que la persona perjudicada por tales injurias sea un funcionario público del estado, se estudiara mediante una investigación profunda si las acusaciones son ciertas o falsas, y en caso de ser verdad, el acusado de las injurias puede quedar libre de toda responsabilidad. Es por esto que los cargos públicos, como los políticos están expuestos a tantas críticas de las que solo se pueden defender si resulta que son falsas, en caso contrario, los que cometen la injuria quedan libres de toda pena.

El responsable del delito de injuria, además de las penas anteriores, está obligado a resarcir a la victima e indemnizarla mediante lo que se viene llamando » la compensación económica de la responsabilidad civil» y está obligado a reparar el daño de la forma y modo que dictamine el juez encargado de tramitar dicha denuncia.

El artículo 12 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, y en la encíclica Pacem in terris dice:

«Todo ser humano tiene el derecho natural al debido respeto de su persona, a la buena reputación…»

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